LA NECESIDAD DE UN NUEVO MODELO DE SOCIEDAD

Desde la antigua Grecia el hombre ya había identificado uno de los aprendizajes más importantes que todo ser humano debe hacer suyo, tal y como se desprende del apotegma: “Conócete a ti mismo”. Pero aunque parezca increíble, esta famosa expresión inscrita en el dintel del oráculo de Delfos parece ser ignorada por la mayoría de los modelos educativos del mundo y aún muchos hombres y mujeres del planeta, por su desconocimiento, van por los caminos de la vida cometiendo muchos errores e impertinencias. Pasando por alto que la primera obligación de todo ser es actuar de acuerdo con propia naturaleza.
Lamentablemente, todavía no a sido posible la interiorización en el alma de la brillante expresión de Píndaro: “Sólo sé el que eres” que bien interpretada quiere decir, sólo compórtate como el ser simbiótico, racional, libre, social, creativo, político, histórico, prospectivo, sexuado y cósmico que eres. El ser humano que se conoce así mismo y actúa como el que es, desprecia todos los comportamientos corruptos, opresivos e injustos por ser contrarios a la autentica naturaleza humana. Un auténtico ser humano reconoce al otro como su igual en dignidad y derechos y le resulta repugnante someterlo a la servidumbre. Un ser humano auténtico es incapaz de lucrar poniendo en riesgo la carga genética de sus congéneres, porque sabe que esos genes dañados serán las taras de sus descendientes. Un ser humano auténtico sabe que depende del entorno natural y esta consciente que como ser racional tiene la responsabilidad de preservarlo porque de ello depende su propia existencia. Un ser humano auténtico sabe dar lo mejor de sí mismo para construir la felicidad de sus congéneres, sin romper el sano equilibrio con las demás especies animales y vegetales y las cosas.
El ser humano alcanza la plenitud cuando se conoce así mismo y actúa congruentemente. Esto sólo será una realidad, para todos, cuando podamos construir un modelo de sociedad en donde dejemos que luchar unos contra otros para poder sobrevivir, tal cual sí fuéramos seres irracionales programados por la naturaleza para depredar. ¡¡¡No!!! Los seres humanos somos seres racionales, sociales, libres y creativos, y bastaría con la sola expresión de estos rasgos de nuestra naturaleza multidimensional para poder crear un modelo de sociedad donde dejen tener vigencia las instituciones que provocan los comportamientos corruptos e inhumanos que sólo sirven de sustento a expresiones como la de Hobbes: “El hombre es el lobo del hombre” y para reflejar la falta de conocimiento de la auténtica naturaleza humana, y para ser usada como herramienta psicología para que un pequeño grupo de enfermos de avaricia y poder opriman y exploten a sus congéneres, obstaculizando el racional desarrollo de la humanidad. ¡¡¡Ya basta, hagamos algo!!! Esto no puede continuar para siempre. Después de todo todos somos uno y lo mismo: la humanidad, y por si fuera poco, la Conciencia del Cosmos.